viernes, 1 de junio de 2018


Quizás sea la palabra “misterio” la primera que se nos viene a la cabeza cuando pensamos en los Rothschild, pero ¿qué tan cierto es lo que se dice de ellos? ¿Realmente han controlado al mundo desde los años 1800? En este artículo te mostramos los hechos que han envuelto a una de las familias más enigmáticas de la historia.
Los Illuminati, una sociedad exclusiva fundada en el siglo XVIII, de la que todo el mundo hablaba, pero a la que muy poca gente podía acceder, creada en inicio como reunión de intelectuales con pensamientos antisistema en la época, surgida como respuesta a la superstición y los prejuicios religiosos de su tiempo, donde el único dios era el saber. Pero, paradójicamente, en torno a esta sociedad se ha creado toda una lógica de supersticiones y conspiración, lo que fue en aumento desde que la Iglesia Católica la prohibiera en 1785 y pasase a la clandestinidad más absoluta.
El poder oculto en España: cómo los Rothschild movieron los hilos
LA GUERRA QUE ESTÁ POR LLEGAR
Esto es lo que aterroriza a los ricos después de la publicación de los papeles de Panamá. El 'Wealth Report' de este año abre una ventana a las ansiedades de los poderosos: la brecha entre ricos y pobres es cada vez mayor y esto puede tener consecuencias
Familia Rothschild
Dinastía de banqueros europeos de origen judío-alemán, que ha ejercido una gran influencia económica y política desde finales del siglo XVIII. Su nombre proviene del escudo rojo (rot Schild) que adornaba la casa en la que vivían sus ancestros en el ghetto de Frankfurt. Mayer Amschel (1743-1812) creó una casa de banca en Frankfurt, especializada en el tipo de negocio que haría rica y poderosa a la familia, el crédito a las casas reales; aunque también hicieron fortuna con otros negocios, como el comercio a gran escala (bienes de lujo, suministros militares), el contrabando, la especulación monetaria, el giro internacional y el descuento de letras. Al iniciarse la industrialización europea los Rothschild se introdujeron también con éxito en la financiación de sectores en alza como el ferrocarril, la minería y la metalurgia.