lunes, 17 de noviembre de 2014

por que la marihuana es prohibida


Marihuana: El gran engaño
Porque llamamos al Cáñamo “mariguana”? A mediados de la década de 1930, la palabra Marihuana fue adaptada para destruir la buena historia y el buen nombre del cáñamo… como nos daremos cuenta más adelante. Los hechos y referencias son verificables en la enciclopedia británica que fue impresa en papel de cáñamo por más de 150 años:
*Todos los libros escolares fueron hechos de papel de cáñamo hasta 1980; Hemp paper reconsidered, Jack Frazier, 1974.
*Era LEGAL PAGAR TAX CON PAPEL de cáñamo entre 1631 y 1800. LA Times, AGO, 12 1981.
*Negarse a cultivar cáñamo en América en el siglo 17 y 18 era EN CONTRA DE LA LEY!. Entre 1763 y 1769 Los infractores podían ser encarcelados en el estado de Virginia.  Hemp in Colonial Virginia, GM. Herdon.  Hemp in Colonial Virginia, GM.  Herdon.
* George Washington, Thomas Jefferson y otros padres fundadores CULTIVABAN cáñamo. Washington and Jefferson Diaries.
*Benjamín Franklin era propietario de uno de los primeros molinos para procesar cáñamo y hacer papel. También la guerra de 1812 fue por el dominio del cáñamo; Napoleón quería cortar las exportaciones de moscow hacia Inglaterra. Emperor Wears No Clothes, Jack Herer.
*por miles de años, el 90% de las cuerdas y velas para barcos eran hechas de cáñamo. The word ‘canvas’ is Dutch for hemp; Webster’s New World Dictionary.
*80% de los textiles, telas, ropa, lino, cortinas.. etc. Eran hechos de cáñamo hasta que en 1820 fue remplazado a causa de la introducción de la máquina de algodón.
*Los primeros textos, biblias, mapas, gráficos y los primeros giros de la declaración de independencia fueron impresos en papel de cáñamo. U.S. Government Archives.
*La primera cosecha en muchos estados fue el cáñamo. El cáñamo fue el cultivo comercial más grande hasta el siglo 20. State Archives.

*Los datos históricos más antiguos sobre el cultivo de cáñamo, son hallados en china, aunque probablemente la industrialización del cáñamo es más antigua, desde el antiguo Egipto.
*Las pinturas de Rembrandt, Gainsborough y Van Gogh fueron pintadas con lino de cáñamo.
*En 1916, el gobierno de E.U. predijo que para 1940 todo el papel vendría del cáñamo y que no era necesario cortar más árboles. Los estudios del gobierno reportan que 1 acre de hemp equivale a 4.1 acres de árboles. Plans were in the works to implement such programs; Department of Agriculture.
*Pinturas y barnices de calidad, fueron hechos de aceite de cáñamo hasta 1937. 58,000 toneladas  de semillas de cáñamo eran usadas en América para producir pinturas hasta 1935. Sherman Williams Paint Co. testimony before Congress against the 1937 Marijuana Tax Act.
*El modelo T de Henry Ford era hecho para funcionar con gasolina hecha de cáñamo y el CARRO EN SI ERA CONSTRUIDO CON CAÑAMO! El carro, “Cultivado del suelo,” tenía paneles plásticos de cáñamo que al ser impactados eran 10 veces más fuertes que el acero. Popular Mechanics, 1941.
*El cáñamo “cultivo del billón de dólares”. Era la primera vez que un cultivo tenía el potencial comercial para exceder un billón de dólares. Popular Mechanics, Feb., 1938.
*Mechanical Engineering Magazine (Feb. 1938), publicó un articulo titulado ‘The Most Profitable and Desirable Crop that Can be Grown.’ El artículo decía que si el cáñamo era cultivado usando la tecnología del siglo 20, sería el cultivo más grande de E.U. y el resto del mundo.
La siguiente información proviene directamente del video de 14 minutos publicado en 1942 por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, animando e instruyendo a los agricultores americanos a crecer 350.000 acres de cáñamo cada año para apoyar la guerra:
…(cuando) Los templos griegos eran nuevos, el cáñamo ya estaba al servicio de la humanidad. Por miles de años, esta planta ha sido cultivada en China y otras partes del Este para crear ropa y cuerda. Siglos antes de 1850, todos los barcos que navegaban los océanos occidentales eran equipados con cuerdas y velas de cáñamo. Para el marinero, igual que para el verdugo, el cáñamo era indispensable…
… ahora con las Filipinas y las fuentes Orientales de la India en las manos de los Japoneses… el cáñamo Americano tiene que suplir las necesidades de la armada y la marina, como también de nuestras industrias.
… Las reservas de la marina decrecen rápidamente. Cuando todo se acabe, El cáñamo Americano va a trabajar otra vez; cáñamo para el amarradero, cáñamo para las líneas de remolque; cáñamo para equipaje; cáñamo para innumerables usos navales. Como en los días cuando los barcos zarpaban los océanos victoriosos con sus velas y mantos de cáñamo. ‘Hemp for Victory!’.
Prueba certificada de la librería del congreso; datos descubiertos por Jack Herer, agencias del gobierno refutan la existencia de la cinta ‘Hemp for Victory’.
La cultivación y producción de cáñamo no daña el medio ambiente. El boletín USDA #404 concluyo que el cáñamo produce 4 veces más pulpa que la madera, con 4 a 7 veces menos polución. Popular Mechanics, Feb. 1938: ‘crece rápidamente… puede ser cultivada en cualquier estado…las largas raíces penetran y rompen el suelo para dejarlo en perfectas condiciones para el siguiente cultivo y sus densas hojas evitan el crecimiento de maleza. …cáñamo, este nuevo cultivo puede contribuir al desarrollo de la agricultura Americana.’
En 1930, las innovaciones en máquinas de agricultura hubieran causado una revolución industrial si eran aplicadas al cáñamo. Este recurso pudo haber creado millones de nuevos trabajos generando miles de productos de calidad. Cáñamo, si no hubiera sido ilegal habría podido sacar a América de la gran depresión.
William Randolph Hearst (citizen Kane) y la división manufacturera Papel Hearst de Kimberly Clark eran propietarios de vastos acreages de zonas forestales. La compañía Herst suplía la mayoría de productos de papel. El abuelo de Patty Hearst, un destructor de naturaleza para su propio beneficio, era amenazado por el cáñamo.
En 1937, Dupont patento un proceso para hacer plásticos derivados del petróleo y el carbón. El balance anual de Dupont urgía a los accionistas a invertir en su división petroquímica. Sintéticos como plásticos, celofán, celuloide, metanol, nylon, rayón, dracon, etc., ahora podían ser hechos del petróleo. La industrialización del cáñamo natural habría arruinado un 80% del negocio de Dupont.
Los trucos
Andrew Mellon se convirtió en el secretario de tesorería y el principal accionista de Dupont. El asigno a su futuro nieto político, Harry J. Anslinger, para ser cabeza de la oficina federal de Narcóticos Y Drogas Peligrosas.
Reuniones secretas eran realizadas por los magnates financieros. El Cáñamo fue declarado peligroso y una amenaza para las corporaciones billonarias. Porque para que sus dinastías siguieran intactas, el cáñamo se tenía que ir: Estos hombres tomaron una palabra slang mexicana: “marihuana” y la impusieron a la conciencia de América.
Manipulación de los Medios
Una avalancha de amarillismo estallaba a los finales de 1920 y 1930. Los periódicos de Hearst publicaron historias enfatizando los horrores de la marihuana. La amenaza de la marihuana llego a las páginas principales. Los lectores aprendieron rápidamente que la marihuana era responsable de todo; desde accidentes automovilísticos hasta inmoralidad en las personas.
Filmes como ‘Reefer Madness’ (1936), ‘Marihuana: Asesina de la Juventud’ (1935) y Marihuana: ‘The Devils Weed’ (1936) fueron propaganda diseñada por estos industriales para crear un enemigo. Su propósito era ganar el apoyo del público para poder aprobar las leyes anti-marihuana.

Examine las siguientes citas de ‘Reefer Madness’
*Un narco activo violento.
*Actos de violencia extrema.
*Locura incurable
*Destruye el alma
*Bajo la influencia de la droga puede matar a su propia familia con un hacha.
*Más viciosa, más mortal que todas estas drogas destructoras de almas (heroína, cocaína) es la amenaza de la marihuana.
*Reefer Madness no tiene el final usual. El filme concluye con estas palabras. ADVIERTA A SUS HIJOS (Tell Your Children).
En la década de 1930, la población era muy ingenua;  hasta el punto de la ignorancia. Las masas eran como ovejas esperando a ser guiados por los pocos en el poder. No desafiaban la autoridad. Si la información salía de las noticias o radio, creían que tenía que ser verdad. Les decían a sus hijos y sus hijos crecían para convertirse en los padres de las personas de 1960.
En Abril 14, 1937, la propuesta prohibitiva de la marihuana, llego al comité “ways and means”. Este comité es el único que puede introducir una ley a la casa sin ser debatido por otros comités. El presidente del comite Ways and Means, Robert Doughton, apoyaba a Dupont. Y se aseguró de que la ley pasara al congreso.
Dr. James Woodward, un médico y abogado, testifico muy tarde en representación de la Asociación Medica Americana. Él le dijo al comité que pasa las leyes al congreso que la razón por la que no habían denunciado esta ley antes era porque la asociación no sabía que la marihuana era/es cáñamo.
Pocas personas en la época, se daban cuenta que en realidad la amenaza de la que habían estado leyendo en los Diarios Hearst era en realidad el cáñamo. La Asociación Medica Americana conocía al cáñamo por ser una MEDICINA encontrada en numerosos productos medicinales vendidos en los últimos 100 años.
En Septiembre de 1937, el hemp se volvió ilegal. El cultivo más útil se convirtió en una droga y nuestro planeta ha estado sufriendo desde entonces.
El congreso prohibió el cáñamo porque supuestamente era la droga que más violencia causaba. Anslinger, Jefe de la Comisión de Drogas por 31 años, promovió la idea de que el uso de la marihuana, convertía a los consumidores en personas extremamente violentas. En 1950, bajo la amenaza comunista de Mc Carthyism, Anslinger ahora decía lo opuesto. La Marihuana te pacificara tanto que los soldados no van a querer pelear.

En este momento, nuestro planeta está en graves problemas. La tierra se está sofocando mientras muchos bosques tropicales desaparecen. Polución, venenos y químicos están matando a la gente. Estos graves problemas pueden ser revertidos si industrializamos el cáñamo. Biomasa natural podría proveer toda la energía del planeta que en este momento es producida por combustibles fósiles. Hemos consumido el 80% de nuestras reservas de petróleo y gas. Necesitamos un recurso renovable. El cáñamo puede ser la solución a nuestros problemas de altos precios de gasolina.
Una Planta Maravillosa
La fibra de cáñamo es superior a la fibra de la madera. Menos químicos cáusticos son requeridos para hacer papel de cáñamo. El papel de cáñamo no se vuelve amarillo y dura mucho más. La planta crece hasta la madurez en una temporada, mientras que a los arboles les toma una vida.
TODOS LOS PRODUCTOS PLASTICOS DEBERIAN SER HECHOS DE ACEITE DE CAÑAMO. Los plásticos de cáñamo son biodegradables! Con el tiempo, se descompondrían y no dañarían el medio ambiente. Los plásticos hechos de Petróleo, a los que estamos acostumbrados, ayudan a destruir la naturaleza; no se descomponen y pueden causar gran daño en el futuro. El proceso para producir plásticos de cáñamo no daña los ríos. La ecología no cabe en la agenda de la industria petrolera y la maquina política. Los productos de cáñamo son seguros y naturales.
LAS MEDICINAS DEBERIAN SER HECHAS DE cáñamo. Deberíamos volver a los días cuando la Asociación Medica Americana apoyaba las curas hechas de cáñamo. La ‘marihuana Medicinal’ es repartida legalmente solo para unos selectos mientras el resto de las personas dependen de un sistema que está basado en químicos. El cáñamo no es nada más que saludable para el cuerpo humano.
El HAMBRE MUNDIAL PODRIA TERMINAR. Gran variedad de productos alimenticios pueden ser generados del cáñamo. Las semillas de cáñamo contienen una de las fuentes más grandes de proteína en la naturaleza. TAMBIEN: tienen 2 de los ácidos grasos esenciales que limpian el cuerpo del colesterol. Tienen 3 veces más omega 3 y omega 6 que el aceita de lino!. Consumir semillas de cáñamo es lo mejor que puede hacer por su cuerpo. Coma semillas de cáñamo sin cocinar.
LA ROPA DEBERIA SER HECHA DE cáñamo. El cáñamo es extremadamente fuerte y duradero. Usted podría heredar su ropa de cáñamo a sus nietos. Hoy, hay compañías Americanas que hacen ropa de cáñamo; usualmente 50% cáñamo. La tela de cáñamo debería estar en todas partes. Pero en realidad la tela de cáñamo esta prácticamente bajo tierra. Los productos superiores de cáñamo no se pueden advertir en la televisión fascista. Kentucky, una vez el estado que producía mas cáñamo, ilegalizo vestir prendas hechas de cáñamo! Puede Imaginar ser tirado en la cárcel por vestir unos jeans de calidad?
El mundo está loco…pero eso no significa que usted tenga que ser parte de esa locura. Júntense. Repartan las noticias. Hablen con las personas, sus hijos, la verdad. Use productos hechos de cáñamo. Eliminen la palabra ‘marihuana’. Conozca la historia que la creo. Sepa que es incorrectamente político decir o escribir la palabra M. Luche contra la propaganda y todas las mentiras (diseñadas para beneficiar a los súper ricos), El cáñamo tiene que ser utilizado en el futuro. Necesitamos una fuente limpia de energía para salvar nuestro planeta. INDUSTRIALIZEMOS EL CAÑAMO!

Las compañías de licor, tabaco y petróleo donan más de 1 millón de dólares al día a la Asociación por Una América Libre De Drogas y a otras agencias similares. Todos hemos visto sus comerciales. Ahora su lema es: “Es más peligrosa de lo que pensábamos”. Mentiras de las poderosas corporaciones, que comenzaron con los Hearst, todavía están vivas y establecidas hoy en día.
El lavado de cerebro continua. Ahora, los comerciales dicen: si compra un porro contribuye a muertes y guerra de pandillas. El ultimo comercial anti-marihuana dice: si compra un porro…. usted está promoviendo el TERRORISMO! El nuevo enemigo (terrorismo) a pavimentado el camino a que seamos controlados de cualquier manera en la que ELLOS quieran.
Solo Hay un enemigo; las personas amigables a las que usted paga impuestos; los mismos impulsores de guerra y destructores de la naturaleza. Con su ayuda, ellos destruyen el mundo delante suyo. MEDIO MILLON DE MUERTES CADA AÑO SON CAUSADAS POR EL TABACO. MEDIO MILLON DE MUERTES CADA AÑO SON CAUSADAS POR EL ALCOHOL.
Ingerir THC, el compuesto activo de la marihuana tiene un efecto positivo; alivia el asma y el glaucoma. Un porro tiende a aliviar las náuseas causadas por la quimioterapia. Usted puede comer cáñamo. Es saludable.
La planta de cáñamo es una planta extraterrestre. Hay evidencia física de que el cáñamo es como ninguna otra planta en la naturaleza. Uno puede concluir que fue creada para el beneficio de la humanidad. El cáñamo es la UNICA planta donde los machos y las hembras son físicamente! diferentes. Nadie nunca habla de machos y hembras en el reino vegetal porque las plantas no muestran su sexo.; excepto el cáñamo. Para determinar el sexo de una planta: tiene que buscar internamente, en su DNA. La planta de cáñamo tiene una sexualidad intensa.
LA MARIHUANA ES ILEGAL PORQUE LOS BILLONARIOS QUIEREN SEGUIR SIENDO BILLONARIOS!
Autor: Doug Yurchey

Una de las características de nuestra especie es que sus individuos somos, al tiempo que gregarios y cooperativos, o precisamente por ello, fácilmente manipulables, ingenuos e incautos.
Si bien es cierto que en muchas ocasiones actuamos con excesivas precauciones en el trato con nuestros semejantes, somos muy confiados con otros asuntos que afectan, a veces de forma que no alcanzamos ni a sospechar, a nuestra existencia.
Hay libertades que no pueden ser otorgadas o conquistadas a medias, y el derecho al propio cuerpo forma parte del derecho mismo a la vida. Haga cada cual lo que quiera con su cuerpo mientras no dañe o perjudique a los demás. Personalmente siempre preferiré un jerez o un té verde a un cigarrillo de hachís, pero sobre gustos no hay nada escrito, aunque siempre habrá quien necesite imponer su verdad. Creerse en posesión de la verdad única y absoluta, la gran prueba de la estupidez humana.
     La triste historia de esa planta que llamamos cáñamo o marihuana puede ser un buen ejemplo tanto de engaño como de ingenuidad humana. Llevaría horas resumir los usos que las diferentes sociedades han dado al cáñamo desde hace no siglos, sino milenios. Asombra comprobar que ha sido uno de los vegetales más extendidos y utilizados: para uso textil, pocos jóvenes saben que los primeros pantalones vaqueros estaban confeccionados con cáñamo, mucho más resistente que los actuales de algodón; sogas y cuerdas de todo tipo, velas de barcos, cestos, ropa, etc. etc. También tuvo usos medicinales, reflejados en innumerables textos a lo largo de los siglos. Los recientes descubrimientos acerca de sus efectos beneficiosos para pacientes sometidos a quimioterapia no son más que una de las tantas utilidades que el ser humano le ha encontrado a esta planta.
Su uso lúdico como estupefaciente, utilizado para producir una especie de borrachera leve, no ha sido, desde luego, el principal, aunque se le dio especial importancia en algunas culturas para actos sacramentales, como medio de comunicación con sus dioses, de forma muy parecida a como los cristianos usan otra droga, el vino, en la ceremonia religiosa de la misa.
¿Qué ocurrió, entonces, el siglo pasado para que esta planta tan aparentemente útil fuera prohibida de repente en Estados Unidos y luego paulatinamente en el resto del mundo?
     Es aquí donde nos encontramos con un ejemplo típico de candidez de las sociedades humanas, de manipulación y de, también hay que decirlo, lucrativo negocio al estilo americano.
En los años treinta el papel se obtenía industrialmente de dos fuentes: del cáñamo, que daba lugar a un papel de excelente calidad, sumamente ecológico y que tenía como único inconveniente que requería mucha mano de obra para el cuidado y recolección de la planta, y de la madera, sistema que aún se sigue utilizando hoy en día y que, como todos sabemos, además de provocar una grave deforestación, da lugar a una de las industrias más contaminantes.
Los años treinta, como prácticamente todo el siglo pasado, fue una época de inventos en todas las áreas, y entre las innumerables máquinas que se crearon y que hicieron menos duras las labores agrícolas se encontraba el descortezador mecánico. Con este aparato la obtención de papel a partir del cáñamo pasaba a ser no solo el sistema más ecológico, sino también el más rentable.
     ¿Por qué entonces en esa misma época se prohibió el cáñamo en vez de aumentar su producción?
     Llegados a este punto entran en escena tres personajes: el primero es William Randolph Hearst, el hombre más rico del mundo en su época. Hearst era propietario de una importante cadena de periódicos en Estados Unidos y como sus empresas consumían grandes cantidades de papel, pensó que podría reducir costes si él mismo compraba los aserraderos y demás empresas relacionadas con la producción de papel, y así lo hizo, invirtiendo en ello enormes sumas de dinero. Pero en 1935, con el invento del descortezador mecánico antes mencionado, mientras miles de familias de agricultores en todo el mundo soñaban con un futuro mejor, Hearst se preocupaba por los aserraderos y fábricas procesadoras de pasta de papel que había comprado, condenadas a una ruina inminente.
Pero lejos de resignarse y admitir que seguiría siendo multimillonario, pero vería su fortuna reducida en parte, decidió que tenía que haber alguna forma de vencer a su nuevo enemigo, esa planta que daba papel de mejor calidad, más barato y sin apenas usar productos químicos en su elaboración. Y utilizó para ello su mejor arma: la manipulación informativa a través de los periódicos de su propiedad. Inició una campaña en la que presentaba al cáñamo, la marihuana, como el origen de todos los males: delitos, violencia, etc. Hearst nunca incluyó en los artículos de sus periódicos ni un sólo informe médico o científico porque todos ellos decían claramente que no se trataba de una planta peligrosa y que tenía, en cambio muchas cualidades positivas, tanto medicinales como de uso industrial. A pesar de ello, millones de americanos le creyeron y empezaron a ver un enemigo en una de las plantas más útiles al ser humano y que era también, entre decenas de usos, fumada por quien le apeteciera, como lo habían hecho, entre otros muchos, los serios y respetables presidentes George Washington o Tomas Jefferson, ambos conocidos y declarados cultivadores y consumidores de marihuana. 
     Pero no era suficiente tener a la opinión pública de su lado para conseguir prohibir un cultivo tan beneficioso, Hearst necesitaba algún cómplice poderoso, y aquí entra en escena el segundo personaje: la empresa petroquímica Dupont, que ya entonces contaba con plantas de producción distribuidas por toda América. Esta empresa también tenía sus razones para combatir a esa planta que se empeñaba en seguir siendo tan incómodamente útil: por una parte Dupont tenía la patente del ácido sulfúrico, muy contaminante, pero utilizado en grandes cantidades en el procesamiento de la pasta de papel obtenida de la madera, con lo que Hearst era uno de sus mejores clientes. Por otra parte, Dupont acababa de desarrollar dos fibras artificiales, el rayón y el nylon, que encontraban en el cáñamo a un ecológico e incómodo competidor.
Los intereses de las empresas de Hearst y las de Dupont coincidían plenamente. Dupont tenía contactos en las altas esferas de la política y las finanzas americanas, entre ellos Andrew Mellon, que era presidente del Mellon Bank, el principal proveedor de recursos financieros de Dupont. La sobrina de Mellon estaba casada con nuestro tercer personaje, Harry Anslinger, comisionado del Departamento Federal de Narcóticos, un individuo que ha pasado a la historia vinculado a varios asuntos turbios que no vienen al caso. Este fue el político ruidoso y tenaz que defendería los intereses de Hearst y Dupont, enarbolando la bandera de la moral, el patriotismo y las buenas costumbres, dio en el Congreso encendidos discursos contra el cáñamo, pero nunca pudo presentar una prueba o un sólo estudio científico que apoyara su tesis. Repitió una y otra vez que era una droga terrible que provocaba agresividad y que debía ser prohibida. Cuando le presentaron informes médicos que decían que era imposible que tal planta provocara agresividad, sino justamente lo contrario, que aplacaba el ánimo, dijo entonces que era una planta antipatriótica, pues no permitiría tener buenos soldados. . .
     Así, el trío Anslinger-Dupont-Hearst, con la ayuda inestimable de la mafia y congresistas corruptos a sueldo de ella, consiguió que en 1937 el cáñamo fuera prohibido en Estados Unidos. A partir de ahí se produjo un efecto dominó que haría que la planta acabara, tras miles de años de convivencia pacífica con el ser humano, prohibida en prácticamente todo el mundo: Si algún país quería tener buenas relaciones con Estados Unidos tenía que incluir tan extraña prohibición entre sus leyes, arruinando a miles de familias de agricultores y obligándose a producir o comprar productos más caros y contaminantes.
No debemos olvidar a un colectivo que apoyó en todo momento y con todos los medios a su alcance la prohibición del cáñamo: la mafia americana, con todas sus diferentes ramas. La razón no era otra que, tras haberse enriquecido desmesuradamente gracias a la Ley Seca que prohibió el alcohol una década antes, quería una nueva materia ilegal que diera lugar a un boyante mercado negro, como sucede siempre que se prohíbe una sustancia. El rotundo fracaso que había supuesto la Ley Seca, dejando a su paso cientos de muertos y 200.000 ciegos por beber alcohol adulterado, no fue lección suficiente para que la sociedad americana no cayera nuevamente en la trampa de un negocio muy dañino socialmente, pero al mismo tiempo muy lucrativo para una minoría codiciosa y sin escrúpulos.
Hasta los años treinta, cuando incluso drogas mucho más peligrosas, como la cocaína y la heroína, se vendían libremente en las farmacias bajo receta médica y control sanitario, el problema social de las drogas no existía, de igual forma que el cáñamo, utilizado en sus mil formas, no llamaba la atención porque una minoría lo fumara en sus ratos de ocio. Fue la prohibición la que consiguió llamar la atención de los jóvenes, al tiempo que les negaba toda información objetiva sobre el origen del problema, haciéndoles caer en la doble trampa de ofrecer una substancia a la que posiblemente no hubieran hecho caso de no estar prohibida, y hacerla deseable, especialmente en la adolescencia, por el mero hecho de prohibírsela.
Los nefastos resultados sociales que tal prohibición ha tenido es conocido de todos, muriendo a diario decenas de personas en el mundo como resultado de la misma, mientras las mafias de todo el mundo y las empresas farmacéuticas continúan haciendo de esta tragedia social su sangriento negocio. Sólo algunos países como Suiza u Holanda han sabido enfrentarse con seriedad y pragmatismo al problema, legalizando las drogas blandas, como en el caso holandés, o administrando heroína controlada sanitariamente a los adictos a la misma, como en Suiza, eliminando así completamente la delincuencia vinculada a estas drogas.
     Esa es la triste historia de esta planta y la campaña de difamación que se desató contra ella. ¿Estuvieron equivocados los griegos, romanos, persas, hindúes, chinos, y tantas otras culturas que la utilizaron durante siglos sin el menor problema, hasta la época de nuestros abuelos, o somos nosotros los equivocados y manipulados, que vivimos en este extraño tiempo de prohibición?
     Es difícil calcular cuantos millones de hectáreas de bosques en todo el mundo no habrían sido destruidos de no haber seguido la historia tan retorcido camino, de no haber prevalecido los intereses mezquinos de un pequeño grupo de hombres sobre los del resto de la humanidad.
     Pero posiblemente, y a pesar de que estos son datos históricos conocidos, y fácilmente comprobables hoy en día, la prohibición continuará durante quien sabe cuántos años más, porque le proporciona un lucrativo negocio a políticos corruptos y a las mafias de todo el mundo, a fabricantes de armas y empresas químicas.
Es asombroso comprobar las estadísticas de muertes por drogas anteriores a la prohibición de las mismas, cuando estaban todas ellas, como una medicina más, en las farmacias: hasta los años treinta, la mayoría de los jóvenes no mostraban interés por consumirlas, al no tener el aliciente de lo prohibido, y los pocos que lo hacían no tenían que delinquir para conseguirlas, no creando el consiguiente problema social. Las drogas ilegales hoy en día eran utilizadas casi siempre por personas mayores como analgésicos ante enfermedades crónicas dolorosas, no creando por ello ningún conflicto social. Los muy pocos casos de muerte por sobredosis (entre 4 y 12 anualmente en los años 30 en España) eran casos encubiertos de eutanasia o suicidio, casi siempre de personas con cánceres terminales.
Los enormes gastos de su prohibición y las consecuencias negativas de la misma las pagamos todos los ciudadanos con nuestros impuestos, mientras algunas empresas farmacéuticas, como Eli Lilly, de la que fue director George Bush padre, tienen el multimillonario negocio de las patentes por la producción sintética de los principios activos del cáñamo, principios que forman parte fundamental de muchas medicinas. Este negocio se vendría abajo si esos compuestos químicos se obtuvieran de forma natural de la planta en vez de sintetizarlos.
Pero somos ingenuos, absurdamente incautos, y a pesar de que hoy día tenemos todos estos datos a nuestra disposición, sigue pesando más sobre todas las sociedades del mundo el engaño a que sometieron a nuestros abuelos un grupo de sinvergüenzas codiciosos hace apenas ocho décadas.
     Si fuéramos algo más cautos, un poco más desconfiados, investigaríamos el origen de hechos y costumbres que damos por buenos sólo porque nos han acostumbrado a ellos desde niños, indagaríamos sobre el origen de la clase política antes de votarles o, mejor aún, exigiríamos que nos consultaran antes de hacer las leyes que van a condicionar nuestra vida: averiguaríamos cual fue el verdadero origen de cada guerra, el de cada religión, y llegaríamos posiblemente a exigir que se nos permitiera gobernar nuestra vida social, que diera la democracia un paso más, como ha hecho a lo largo de la historia, exigiendo que se nos permitiera votar, mediante sistemas informáticos, las leyes más importantes que nos gobiernan: declaraciones de guerra, presupuestos, sueldos de los políticos, privilegios de la banca, etc.: media hora a la semana sería suficiente. Tendríamos así en nuestras manos las herramientas necesarias para mejorar el mundo con una efectividad que nos asombraría.
¿Cuánto tardaríamos en proponer y promulgar una ley que prohibiera los paraísos fiscales, refugio de los billones robados impunemente en la última crisis, o una ley que gravara los capitales financieros especulativos, para conseguir evitar fácilmente, con ese dinero, la muerte diaria de más de 27.000 niños por hambre o falta de vacunas?
Posiblemente, si hiciéramos eso ya no moriría tampoco ningún joven por las drogas adulteradas que les venden las mafias, posiblemente se acabarían todas las guerras en unos pocos años y con ellas tantos negocios de muerte. . .
Pero ese sería otro mundo, un mundo que, tal vez porque históricamente siempre ha ido mejorando, aunque muy poco a poco, o tal vez porque soy humano y por tanto de naturaleza absurdamente ingenua, creo que, algún día, y a pesar de todo, llegará a ser realidad.
nekovidal@arteslibres.net
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